El potenciometro es un dispositivo que tiene un contacto móvil que se mueve a lo largo de la superficie de una resistencia de valor total constante. Este contacto móvil se llama cursor o flecha y divide la resistencia en dos resistencias cuyos valores son menores y cuya suma tendrá siempre el valor de la resistencia total. La característica principal de estos elementos, es que el valor en ohms del dispositivo puede ser ajustado dentro de un rango limitado por el valor marcado en el dispositivo (valor máximo).
Son ampliamente utilizados en controles de volumen en sistemas de audio, en sistemas de control de potencia, en circuitos de precisión que requieren un valor específico de resistencia, etc.
① Terminales de conexión: Estan construidos con lámina de cobre y cubiertos con una aleación plomo-estaño. Están sujetos a presión en el soporte de fibra, para permitir un adecuado contacto con la película resistiva.
② Soporte: Una lámina de fibra o baquelita se emplea como soporte de esta clase de potenciometros.
③ Película de carbón: Se deposita una película con un aglutinante especial para reducir el desgaste producido por el contacto móvil.
④ Soporte de plástico: Proporciona estabilidad al girar el eje del potenciometro, ademas, tiene un tope para impedir que el contacto móvil gire a un punto de contacto nulo con la película de carbón.
⑤ Contacto móvil: Esta fabricado en cobre, o con alguna aleación resistente a la corrosión. Es muy flexible, permitiendo un montaje a presión sin perder su forma, asegurando de este modo un buen contacto con la película.
⑥ Eje: Puede ser de plástico o aluminio. Permite modificar la posición del cursor del potenciometro.
En un potenciómetro lineal la variación es constante con respecto al desplazamiento del contacto móvil. En los logarítmicos esto no ocurre: la variación del valor no es proporcional al desplazamiento del contacto móvil.
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